El lenguaje de la viña y la bodega (“B”)

Siguiendo con la obra de Francisco Gómez Ortin,  “Vocabulario del Noroeste Murciano” (1991), señalamos en esta entrada las palabras que comienzan por la letra «B».

En los «bancales» se cultiva la viña y consituye una porción de tierra destinada a un mismo cultivo, conformando el conjunto de una finca o huerto el «bancalaje«. La «barbu(d)a» es el sarmiento con raíces que sirve para plantar viñas -barbado, según el DRAE.

Las vides «borraban» cuando echaban yemas o «borrones«, salía la flor o yema de la vid. Después se hablaba de que las vides tenían «brocás (das)» para señalar el pulgar o la yema de las mismas.

Una de las castas de la zona es la «bobal» variedad de uva gruesa, negra, que se emplea para hacer vino pero también cómo uva de mesa.

En la bodega tras la pisa de la uva se obtenía la «brisa«, así se conocía al orujo de la uva, a la madre del vino.

El vino de las bodegas se podía distribuir en «bombanas» (es decir, bombonas) que eran unas vasijas o recipientes de cualquier material de boca muy estrecha y cuerpo barrigudo con capacidad para varios litros.

Los bebedores de vino que bebían en exceso se «cargaban de bombo«, celebrándolo con «brindes«, es decir, con brindis.

Del Testamento de Antonio Carreño, Regidor de Cehegín, de 17 de septiembre de 1595 tenemos la palabra «bacillar» referida a una viña nueva.

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