Un cambio de siglo para el aguardiente en Moratalla -III-
En el marco de las exposiciones decimonónicas se desarrolla la figura del «bodeguero ilustrado» en el Levante español de la que tanto nos ha hablado el profesor Juan Pan Montojo. De esta manera podríamos calificar la personalidad del político republicano Pedro Vélez y López –El Eco de Cartagena, 13/03/1886, pág. 3-, seguido por su hijo Juan Vélez Guillén, quien orgulloso de la calidad de su producción no duda en participar y recoger reconocimientos en diversas exposiciones de la época.
En la Exposición Agrícola de Murcia de 1876 el fabricante local de aguardientes Pedro Vélez y López participó con unas muestras de aguardiente anisado de 1ª, 2ª y 3ª clase, obteniendo el reconocimiento del Jurado con la concesión de una medalla de cobre (expediente de la Exposición Agrícola de Murcia de 1876, Archivo Municipal de Murcia).
Por el catálogo de la Exposición Vinícola de Madrid de 1877 (Participante Nº 6650) sabemos que este productor tenía su fábrica situada en la Calle de la Corredera, 1 de Moratalla. En dicho certámen Pedro Vélez y López envió una muestra de Aguardiente anisado que se vendía a 15 pesetas la arroba y a 15,50 en establecimientos. Igualmente, remitió una aguardiente anisado doble que se vendía a 30 pesetas la arroba y a 30,50 en establecimientos, así cómo otro dulce a 45 pesetas la arroba y a 45,50 en establecimientos. La producción anual del fabricante era de 240 arrobas del primero y 20 de los siguientes.
De exitosa podemos calificar la participación de Pedro Vélez en este certamen ya que los tres productos enviados recibieron una Medalla de Perfección, tanto para el Aguardiente doble como para el dulce, así cómo una Mención para su Aguardiente anisado (La Paz de Murcia, 14/10/1877, pág. 1).
Al igual que el resto de comarcas vinícolas españolas, el noroeste murciano envió una muestra de sus vinos y aguardientes a la Exposición Universal de París celebrada en el año 1.878.
A diferencia del resto de Ayuntamientos de la comarca, Moratalla no remitió a la exposición una muestra de caldos y aguardientes locales, sin embargo sí que hubo una pequeña participación de algunos bodegueros locales que enviaron algunos de sus productos. En lo que respecta a los aguardientes, D. Pedro Velez y Lopez de Moratalla envió a la exposición una muestra de aguardiente doble y anisado dulce (según el Catálogo: aguardiente doble anisado dulce, aguardiente doble anisado seco y aguardiente anisado).
La fama del aguardiente de Pedro Vélez y su hijo hizo escribir al cronista del Diario de Murcia en su edición de 20 de diciembre de 1885, pág. 3, las siguientes palabras:
«El aguardiente de caña lo llevan a Puerto Rico y repican las campanas como, si fuera el obispo; así lo dice la copla, que no soy yo quien lo digo. Lo que, por mi cuenta, yo me atrevo a afirmar y afirmo, es que si con el de caña hacen eso en Puerto-Rico, si llevaran el que hacen Pedro Velez y su hijo, del cuál en la Puxmarina hay abundante surtido, le harían fiestas reales y otros grandes regocijos. El leer ahora estos anuncios, es necesario, preciso. (…)«.
Del negocio de la Puxmarina (Murcia) al que se hacía referencia en esta copla tenemos noticia en la edición de El Diario de Murcia de 2 de junio de 1.886, págs. 2 y 3, donde se informa a los lectores que entre otros excelentes productos contaba el bazar regentado por D. Guillermo García con un aguardiente tripel anisado de Moratalla, que es el mejor del mundo, y honra al fabricante D. Pedro Velez, del que había recibido una buena partida.