Monsieur Bacqué y la Bodega de los Franceses (III)

Para el mes de agosto de 1890 las obras de la bodega de Monsieur Bacqué avanzaban ante la expectación de viticultores y operarios de la localidad. Las obras deberían estar terminadas para la recogida de la cosecha y todos esperaban que se vieran favorecidos sus intereses, según nos explica el corresponsal de El Diario de Murcia en su edición del 19 de agosto de 1890, pág. 2.

Muy adelantados se encontraban los trabajos de la magnífica bodega que se construía en el barrio de las Maravillas por nuestro comerciante francés, cuando el periódico La Paz de Murcia, el día 30 de septiembre de 1890, pág. 1, señala que los viticultores estaban expectantes de los precios ofertados por Agustín Bacqué a fin de decidirse a vender su uva a esta bodega o elaborarla por sí mismos. Los rumores corrían por el pueblo, se decía que Mr. Bacqué ya había contratado partidas importantes de propietarios forasteros.

Sin embargo, con la vendimia ya bien avanzada, el día 7 de octubre de 1890 se confirmaba que las obras no estarían terminadas a tiempo de elaborar sus primeros caldos. El Noticiero de Lorca señalaba cómo a pesar del interés del dueño y el celo y actividad de los operarios, era imposible ni siquiera dejarla en condiciones de ser utilizada en esa cosecha. Por ese motivo, indicaba el corresponsal, Mr. Bacqué no había hecho ningún contrato para la compra de uvas ni fijado precios, lo que según el propio comerciante hubiera sido un compromiso personal.

Este contratiempo supone un revés para Agustín Bacqué y altera los planes inciales. Durante la temporada 1890/1891 habrá de limitarse a comprar vino a los cosecheros locales para almacenarlos en su bodega y posteriormente exportarlos al mercado francés. Para ello establece relaciones comerciales con los hermanos Antonio y Diego Agudo Ruiz (según se desprende de la Cédula publicada por el Juzgado de Instrucción de Cehegín, BOPM Nº 128, de 27/11/1897, pág. 4). Los hermanos Agudo Ruiz son corredores de vino de la localidad (así resulta de la relación de industriales insolventes de Cehegín publicada por la Administración de Contribuciones de Murcia en el Boletín Oficial de la Provincia de Murcia Nº 56 de 3 de septiembre de 1890). Serán ellos los encargados de abastecer las necesidades de vino de Mr. Bacqué.

Para el verano de 1891, terminadas ya desde hace meses las obras de su bodega, Monsieur Bacqué hace instalar un nuevo aparato destilatorio para obtener alcohol del vino con destino a su exportación a Francia. Tres periódicos nos informaban de ello en su edición del 21 de julio de 1891:

En la bodega de los franceses situada en el Barrio de las Maravillas de Cehegin, está montándose, y dentro de muy poco empezará a funcionar, un aparato destilatorio y rulatorio movido a vapor destinado a extraer alcohol de vino hasta de 40 grados para exportarlo a los mercados de Francia; habiéndosenos manifestado por persona bien enterada, que quemará el artefacto dicho diariamente más de 70 hectolitros de vino. (Diarios Las Provincias de Levante, El Diario de Murcia  y La Paz de Murcia).

Un mes más tarde, en concreto el día 23 de agosto de 1891, el corresponsal del periódico La Luz de la Comarca señalaba que el aparato destilatorio de los franceses seguía funcionando con gran éxito, siendo el alcohol que extraían, aún de los vinos más malos, de superior calidad. (Dos días después, el 25 de agosto de 1891 la misma noticia aparecía repetida en La Paz de Murcia).