La cooperativa San Isidro en 1993

En octubre de 1993 el diario La Verdad recogía una entrevista con el enólogo Nicolás Bastida Sánchez, quien se había incorporado a la Cooperativa Vinícola Agraria San Isidro de Bullas en el año 1992, en la que se indicaba que la bodega había incorporado tecnología en acero inoxidable para elaborar su producción.

«Tenemos, por ejemplo, una tolva de descarga en acero inoxidable, patinadora, derraspadera-estrujadora y otros elementos. En cuanto a la elaboración, hemos incorporado dos autovinificadores de acero inoxidable de 50.000 litros cada uno«.

Los autovinificadores se llaman así por elaborar en forma mecanizada el vino tinto, pero conservando al mismo tiempo todas las características de la elaboración tradicional: «Le incorporamos una serie de controles para conseguir un producto final. Cabe resaltar que todos estos controles son físicos, sin aditivos químicos. La temperatura adecuada se mantiene mediante refrigeración con agua fría externa, así no se producen ebulliciones por fermentación , y de ese modo se conservan los aromas característicos de la variedad de uva que es Monastrell en un 95%. En el futuro, la idea es elaborar un vino tinto con esta tecnología«.

La cooperativa San Isidro cuenta con aproximadamente 250 socios, y elabora alrededor de un millón de litros anuales para reparto a granel. Se comercializa a nivel nacional, y no embotellan de momento, pero planean hacerla el próxmo año.

Artículo aparecido en el diario La Verdad, 2 de octubre de 1993.

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